Un juguete de aprendizaje de la primera infancia ideal para aprender colores mientras se divierte. Con tubos de plástico y grandes piezas de madera maciza, los niños pueden elegir entre 2 formas de jugar: 1. Siguiendo el color de los tubos para colocar las fichas o 2. Siguiendo el orden indicado en las tarjetas Una de las características más ingeniosas es los tubos intercambiables, que aportan mayor dificultad para evitar que la actividad se vuelva repetitiva.
Aprendizaje: Desarrollo de la motricidad fina, aprenden colores, conteo y destreza.
Contenido: Viene con 12 patrones, 16 contadores y 4 tubos de diferentes colores. Este producto ayuda en el desarrollo de: coordinación ojo-mano, conciencia de formas y colores.
Material: Piezas pintadas con pinturas al agua. Madera: contrachapado (bandeja), madera de haya (bloques).
Edad: +24 meses.